PROYECTO DE
RESOLUCIÓN
La Honorable
Cámara de Senadores
RESUELVE
Dirigirse al
Poder Ejecutivo Nacional para que a través del organismo que corresponda
informe el estado actual del proceso de entrada en vigencia del
Protocolo Facultativo de la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas
de Discriminación contra la Mujer, aprobado en nuestro país por Ley 26.171 de
diciembre del 2006. Al respecto esta Cámara desea saber:
1.- Si se
han cumplimentado el depósito del instrumento de ratificación en Naciones
Unidas,
2.- De
resultar negativa la respuesta, cuáles son los fundamentos para la demora
a tres meses de aprobada la ratificación y habiendo sido la misma impulsada por
el propio Poder Ejecutivo,
3.- De
resultar afirmativa la respuesta, cuál es el plazo estimado por el P.E.N. para
efectuar el depósito,
4. De mediar
decisión en contrario, cuáles son los fundamentos de la
misma.
FUNDAMENTOS
Señor
Presidente:
En diciembre
de 2006, el Congreso de la Nación aprobó por amplia mayoría el Protocolo
Facultativo de la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de
Discriminación contra la Mujer, aprobación que había sido objeto de un amplio
reclamo por parte de la ciudadanía y del cual se hizo eco finalmente el Poder
Ejecutivo de la Nación.
No es
necesario abundar en la importancia de este instrumento en pos de garantizar el
ejercicio pleno de los Derechos Humanos de la Mujeres y una real Equidad. Esta
Cámara los conoce y ha dado muestras de interpretar acabadamente su
valor.
Sabemos
asimismo que tal como una Ley demanda ser sancionada por el Congreso,
promulgada por el Poder Ejecutivo y finalmente publicada; los
Tratados deben ser firmados, ratificados por el Congreso y el Poder Ejecutivo y
luego depositados en Naciones Unidas para su entrada en vigencia. De no
cumplirse estos pasos, todo lo actuado deviene absolutamente abstracto y hace
inaplicable el instrumento sancionado.
La
aprobación del Protocolo Facultativo de la CEDAW debió afrontar la resistencia
de un arco de sectores religiosos y políticos radicalizados que sin
dudarlo conocen muy bien la necesidad del depósito del mismo en Naciones Unidas;
a tal punto, que una vez aprobado el protocolo una solicitud de la Iglesia
para que no se depositara fue publicada en los diarios.
En suma, a
tres meses de ratificado por este Congreso Nacional, el Poder Ejecutivo no
ha cumplimentado aún estos pasos a pesar de reiteradas solicitudes de diversas
organizaciones. Esta omisión es preocupante y amerita ampliamente que tanto este
Congreso como el Poder Ejecutivo Nacional no dejen lugar a dudas sobre su
intención hacia la vigencia irrestricta de los derechos de las mujeres; lo
cual sin duda, redunda en una mayor credibilidad de nuestro país y la
profundización del Estado de Derecho.
Por lo
expresado, solicito a mis pares acompañen con su voto la aprobación del presente
proyecto.
Senadora Nacional Amanda
Isidori