NOTIVIDA, Año IV, nº 239, 16 de agosto de 2004

Buenos Aires, Argentina

INFORME OFICIAL DERRUMBA ARGUMENTOS ABORTISTAS

Según el Ministerio de Salud de la Nación, el número de muertes maternas ha disminuido en un 15% el último año. El estudio elaborado por el CEDES estimó que esta cifra se reduciría muchísimo más con sólo mejorar la estructura hospitalaria, sin embargo se insiste en la liberalización del aborto.

A instancias de la diputada María Elena Barbagelata (PS,Cap.Fed.) se realizó el 12 de agosto, en la Cámara de diputados de la Nación, la presentación del informe del Centro de Estudios de Estado y Sociedad (CEDES), sobre mortalidad materna. Durante el evento, Barbagelata agradeció especialmente la presencia de Juliana di Tullio, encargada del área de la mujer de Cancillería, a quien definió como la “batalladora del cambio de postura argentina en los foros internacionales”, es decir una de las responsables directas del alineamiento de nuestro país con la ONU, las ONG’s y las naciones que han reconocido el llamado derecho humano de la mujer al aborto.

El CEDES llevó a cabo su investigación con la colaboración del Centro Latinoamericano de Perinatologia y Desarrollo Humano (CLAP/OPS), y gracias a los apoyos de la Comisión Nacional de Programas de Investigaciones Sanitarias (CONAPRIS) del Ministerio de Salud, el Fondo de Población de Naciones Unidas y la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud. Los relevamientos se hicieron entre noviembre de 2002 y octubre 2003; y este año se publicó el informe que lleva por título “Mortalidad materna en la Argentina: diagnóstico para la reorientación de políticas y programas de salud”.

El trabajo fue presentado por Silvina Ramos, directora del CEDES y Mariana Romero investigadora de la misma entidad. Es de notar que Romero cuando se le preguntó cómo formular denuncias vinculadas al aborto, en organismos internacionales; respondió que eso no podía hacerse todavía ya que aún no está ratificado el Protocolo del Cedaw.

Según se informó, la investigación se propuso realizar un diagnóstico y análisis de situación de la mortalidad materna en la Argentina que pueda ser utilizado para reorientar las políticas y los programas de salud, así como también para identificar nuevas líneas de investigación.

Legalizar el aborto

El diagnóstico de la mortalidad materna se efectuó en seis provincias: Chaco, Formosa, Mendoza, San Juan, San Luis y Tucumán. Trabajando en todas ellas con gente del lugar para mejorar las políticas sanitarias en salud reproductiva (aborto encubierto).

Conforme al informe, de 95 defunciones maternas ocurridas en las seis provincias, 25 de ellas, es decir el 27,4%, correspondieron a complicaciones por aborto (entendemos que la cifra suma provocados y espontáneos), con magnitudes que van desde 21% (Tucumán) a 35% (Mendoza). El nivel de subregistro de defunciones maternas fue de 9,5% para el conjunto de las seis provincias, cifra sensiblemente inferior a la esgrimida por abortistas.

Destacaron que el riesgo de muerte materna aumenta 10 veces cuando la estructura hospitalaria no es la adecuada.

Entre las propuestas que el CEDES elevó al Ministerio de Salud con el informe, figuran:

* Generar una mayor conciencia colectiva en torno al problema de la mortalidad materna involucrando a la comunidad y a diferentes organizaciones de la sociedad civil.

* Fortalecer las acciones en prevención del embarazo no deseado a través de servicios de salud reproductiva que incluyan la consejería y provisión gratuita anticonceptivos.

* Revisar las disposiciones legales sobre el aborto, porque la clandestinidad de su práctica expone a las mujeres.

Tras la presentación, hicieron uso de la palabra María del Carmen Feijoo, representante del Fondo de Población de Naciones Unidas; Nora Rébora, Directora Nacional de Salud Materno Infantil del Ministerio de Salud de la Nación; Diana Galimberti, subdirectora del Hospital Teodoro Alvarez y presidenta de la Asociación Argentina por la Salud Sexual y Reproductiva; Alejandra Tadei, Procuradora General de la Ciudad de Buenos Aires y Clori Yelicic, Directora de Regulación y Control de la Secretaría de Salud de la misma ciudad.

Feijoo se mostró satisfecha con el cambio de posición de Argentina en los foros internacionales, es decir destacó como positiva la postura abortista del gobierno.

Rébora explicó que sólo el 40% de las maternidades del país cumple con las condiciones obstétricas mínimas. Que en el Plan Federal de Salud existe el compromiso de reducir la mortalidad materna y que en el 2003 se produjeron 50 muertes maternas menos que en el año anterior. (Recordemos que según las cifras oficiales, las del 2002 fueron en total 356 por todas las causas, y que el total de muertes vinculadas al aborto provocado no puede superar el centenar anual en todo el país, Notivida 215).

Galimberti tras celebrar que este Gobierno le diera a las mujeres las respuestas que no tuvieron por 10 años, lamentó que aún muchas tengan que recorrer 2 ó 3 hospitales antes de morirse –porque no hay sangre o falta personal-, que los jefes de servicio atiendan los partos con guantes que no son estériles y que en muchos lugares del país los legrados se practiquen sin anestesia. Afirmó además, que un buen porcentaje de la mortalidad materna lo aportan las cesáreas.

Rébora y Galimberti corroboraron lo que el informe había anticipado, la mortalidad materna está fundamentalmente vinculada a la estructura hospitalaria.

Yelicic recordó sus batallas cuando siendo diputada de la Ciudad de Buenos Aires bregaba por la ley local de salud reproductiva (aborto encubierto) y alabó reiteradamente el fallo del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad que dispuso que los menores pueden recibir los anticonceptivos a espaldas de sus padres.

Tadei describió el dictamen que efectuó recientemente autorizando un aborto en la Ciudad de Buenos Aires, y se quejó de los “temores y prejuicios” que tienen los médicos para estas prácticas, aún en casos comprendidos entre los no penalizados. Según relató, ella misma les dijo a los médicos que “la omisión también genera responsabilidades” y que “no tienen que pedir autorización para un aborto permitido por la ley, como no la piden para una amputación”.

De acuerdo con las políticas abortistas de las Naciones Unidas hubo promesas de proporcionar anticonceptivos, incluidos los abortivos para la anticoncepción de emergencia, a las refugiadas.

Además de Barbagelata estuvieron presentes en la reunión las diputadas Mónica Kuney (PJ,Sta.Cruz) y Marta de Brasi (Autodeterminación y Libertad,Cap.Fed). Al término, se distribuyó un CD del Fondo de Población de Naciones Unidas, con material de dicho organismo. FIN

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NOTIVIDA, Año IV, nº 239, 16 de agosto de 2004

Editores: P.Juan C. Sanahuja y Mónica del Río

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